El consumo de anfetaminas genera euforia, aumenta la energía y provoca falsas sensaciones de lucidez y sociabilidad. Pero las alteraciones provocadas por su ingesta se mantienen en el cerebro hasta por 39 días, afectando a la memoria, el aprendizaje y la actividad motora. Una investigación del Laboratorio de Neurociencia Celular de la Universidad Pablo de Olavide de Sevilla arrojó como resultado que los efectos del consumo de anfetaminas se mantienen a largo plazo, causando cambios en el hipocampo, lo que genera pérdida de las capacidades de memoria y aprendizaje. Los expertos indican que sus efectos dependen de factores como el tipo de anfetamina que se consuma o la edad de…