España es el país europeo en el que más cocaína se consume. Se trata de la droga más habitual en las consultas toxicológicas que llegan a urgencias aunque los expertos alertan de los peligros de otros tipos de drogas, nuevas y menos conocidas, como el basuco o las conocidas como drogas inteligentes. Aunque las consecuencias a largo plazo de la cocaína pueden ser muy dañinas, sobre todo si han lesionado órganos, el riesgo de esta droga está muy asociado al consumo agudo.
Según Guillermo Burillo, del Servicio de Urgencias del Hospital Universitario de Canarias, en Santa Cruz de Tenerife, «como la mayoría de las personas que acuden a urgencias porque han consumido cocaína tienen entre 15 y 40 años, quizás en unos años veamos un aumento de los pacientes con problemas cardiovasculares».
El síntoma más frecuente en la persona que acude a urgencias por consumo de cocaína es el dolor torácico, que puede deberse a diferentes causas. «Por eso es tan importante realizar un buen diagnóstico diferencial», señala Miquel Sánchez, director de Urgencias del Clínico de Barcelona. «Puede deberse a una crisis de ansiedad, a un dolor muscular, a un neumotórax, sobre todo cuando el paciente ha fumado la cocaína. Y, descartadas estas posibles causas, hay que hacer lo mismo con el infarto o la angina de pecho. Para ello, se hace un electrocardiograma».
Uno de los problemas a los que se enfrentan los médicos de urgencias es el consumo oculto de cocaína ya que hasta un 20 por ciento de consumidores lo niega lo que puede hacer que el médico aplique un tratamiento inadecuado.
En los últimos tiempos, quizás a causa de la crisis económica, se está popularizando una forma de cocaína barata que se conoce como basuco. No hay que olvidar que las sustancias adulterantes que se añaden a la cocaína para potenciar su efecto o cortarla pueden suponer un grave riesgo para la salud. En general, “la calidad de la cocaína ha empeorado mucho en el último año», asegura Mireia Ventura, doctora en Farmacia y coordinadora del servicio de análisis de Energy Control, un proyecto de la ONG Asociación Bienestar y Desarrollo (ABD), que ofrece la posibilidad al consumidor de analizar su dosis de droga para conocer mejor los riesgos.
Tras la cocaína, las drogas de diseño son la segunda causa más frecuente de consulta toxicológica en urgencias. «Luego vendrían las drogas de diseño, cuyos consumidores suelen acudir por una crisis de ansiedad. No vemos muchos casos debidos a marihuana o hachís, que suelen acudir por hipotensión o trastornos de la percepción. Y algunas personas tienen alergia a alguna droga», apunta Òscar Miró, consultor del Servicio de Urgencias del Clínico de Barcelona y editor de la revista Emergencias.Fuente: 7/jun/2011 Diario Médico
